Quizás mañana, se dijo, sin mucha convicción. Quizás mañana, con la noche de por medio, descubriera de dónde venía. Había revisado milimétricamente, ajustando todo, y aún así, no lograba eliminar el chirrido. ¿Le seguiría faltando? Imposible; todavía escarmentaba la carencia de la última vez. Como quien pone un manto de piedad, se tapó con la sábana. ¿Que no era perfecta? ¿Que no resplandecía? Eso está por verse, alcanzó a murmurar antes de que el sueño lo venciera. Cansado, desvencijado por el temor, el sufrido metal de su armadura quedó en silencio.
©Mariángeles
Abelli Bonardi
Con
este microrrelato participé en la décima semana del concurso Relatos en
Cadena (ReC). La frase resaltada es la frase de inicio correspondiente
al último relato ganador. Si desean leer las bases, hagan clic en: http://escueladeescritores.com/concurso-bases-rec-2013
Muy bueno el relato, Mari Ángeles. Un saludo.
ResponderBorrar¡Muchas gracias, ÁNGEL! Me complace que sea de tu agrado.
ResponderBorrarTe retribuyo el saludo con el deseo de que pases muy Felices Fiestas.
Nos leemos, M.
La armadura forma parte de uno mismo, a veces.
ResponderBorrar(sigo sin recibir en mi email tus actualizaciones. Sin embargo estoy suscrita a otros blogs y no me dan problemas. Argggggg)
Así es, BEATRIZ. La armadura de la historia fue la excusa para hablar de esas armaduras internas a las que hacés referencia, en este caso, el valor.
BorrarCon respecto a las actualizaciones, comparto la frustración. Veré que puedo hacer para solucionar el problema.
Cariños, Mariángeles
¡Qué bonito!
ResponderBorrarTe envío un gran saludo y aprovecho para felicitarte por las fiestas decembrinas. :)
¡Muchas gracias, VICENTE!!! Me alegra que el micro sea de tu agrado.
ResponderBorrarRetribuyo el saludo y deseo que pases unas Felicísimas Fiestas junto a tus seres queridos.
Cariños, Mariángeles
Con la armadura recién engrasada te deseó unos buenos días de paz y armonía.
ResponderBorrar¡Muchas gracias, PATRICIA!!! Aquí el día ya está mediando, en unas horitas más celebraré la Navidad en familia. Que en esta Navidad encuentres la alegría, compañía y cariño de quienes bien te quieren, yo estaré con vos en espíritu.
ResponderBorrar¡FELICES FIESTAS!!!
Cariños,
Mariángeles