I.
Entre mis labios
la acidez sonrosada
de una frutilla.
II.
II.
Fluye verdoso
el virginal murmullo
de las olivas.
III.
Su labia era
III.
Su labia era
así de empalagosa;
como la envidia.
IV.
Gotas que caen;
IV.
Gotas que caen;
crujido transparente
del desamor.
V.
V.
Se oye el disparo
y la estampida gris
de un elefante.
©Mariángeles Abelli Bonardi
En Twitter soy @queenmab1974
En Twitter soy @queenmab1974
Abril 2014
Estos haikus de mi autoría fueron publicados con los hashtag #haiku y #TallerLiterario en mi cuenta de Twitter, @queenmab1974; con ellos participé en "Trabajando con la sinestesia", la propuesta creativa del blog El Fantasma de la Glorieta. Si quieren saber más, hagan clic en
Hola, Mariángeles.
ResponderBorrarTodos los textos son buenísimos, pero mi favorito es este:
«Se oye el disparo
y la estampida gris
de un elefante».
Me parece surrealista y condensa muchas cosas. Felicidades.
Últimamente he andado corto de tiempo pero siempre es un lujo leerte.
Un abrazo.
Me parece que tiene mucho mérito por tu parte elaborar un haiku a partir de las propuestas del taller. Me gustan especialmente el I, II y V.
ResponderBorrarQué gusto que le veas mérito a mi labor, BEA; disfruté mucho escribiendo estos haikus; creo que de los que elegiste, el primero y el quinto se ajustan mejor al concepto de sinestesia.
BorrarGracias por pasar a comentar.
Cariños, M.
¡Y el mío también, VICENTE! A mi modo de ver, el haiku del elefante es el más logrado de los cinco. Gracias por tus generosos conceptos y por regalarme estos preciados minutos de tu tiempo.
ResponderBorrarOtro abrazo para vos, M.
Los he leído encantada, yo también soy una "viciosa" del haiku.
ResponderBorrarMi preferido es el V. Se ve, se oye, se siente...
Edita N. T.
Yo creo que somos muchos los "viciosos" del haiku, pero pocos lo admiten, jaja... Qué gusto que mis haikus hayan sido de tu agrado, EDITA; el quinto haiku, el del elefante, también es mi preferido, y por las mismísimas razones que vos.
ResponderBorrarCariños, M.