EL NOMBRE DEL FUEGO. ¿Puede un fuego arder más que el fuego mismo? Puede, si su nombre es lujuria.
SIN CITY. En la ciudad del pecado, la lujuria es el pecado capital. Sus habitantes, naturalmente, se jactan de ello.
PASIÓN (INDECO)ROSA. Desde que supo su nombre, el monje la deseaba con mucho más ardor. El nombre de la rosa era Adso de Melk.
©Mariángeles Abelli Bonardi
Estos hiperbreves de mi autoría fueron publicados el pasado 17 de octubre en mi cuenta de Twitter, @queenmab1974, como parte del ejercicio conocido como #jueverotic. El tema propuesto le da título a esta entrada.
Ese fuego poderoso, contado con tanta elegancia.
ResponderBorrarUn abrazo, Mari Ángeles
Borrar¡Muchas gracias, ÁNGEL! Es que hay fuegos que, ante la menor falta de elegancia, se apagan definitivamente ;) ...
Otro abrazo para vos, M.
Contra gula, lujuria, suelo decir yo.
ResponderBorrarUn saludo
JM
BorrarLo voy a tener en cuenta, JM; ya se sabe que a las mujeres, la gula no nos conviene (nuestras caderas, agradecidas ;)
Cariños, M.